PERÚ: Montaña de los siete colores
Varias son las excursiones que se pueden realizar con base en la ciudad de Cuzco, nosotros decidimos realizar dos. La primera, subir a la Montaña de los siete colores y, la segunda, llegar hasta la Laguna de Humantay.
Vinicunca o la montaña de los siete colores forma parte de la cordillera de los andes, más exactamente del nevado Ausangate, el más alto de la región Cuzco.
La cantidad de minerales que alberga es lo que le da esos colores tan característicos y la razón por la que, a partir de 2015, se popularizara su visita impulsada principalmente por las redes sociales. Nos contaron también que la montaña solía estar siempre cubierta de nieve y que en la actualidad eso ya no ocurre.
Por recomendación de nuestros amigos que habían visitado Perú en 2019, queríamos hacer el trekking de la montaña de los siete colores y el valle rojo. Es decir, subir por un lado de la montaña y descender por otro totalmente distinto. No todas las agencias hacen esta opción por eso nosotros reservamos con Inka Time.
Cuando fuimos a reservar el tour (de manera presencial en su oficina de Cusco) nos comunicaron que no iba a ser posible regresar por el Valle Rojo ya que, las comunidades propietarias de las tierras por las que pasa el camino, no se ponían de acuerdo en cómo gestionar el dinero que se cobra por entrar a la montaña.
La montaña había abierto al turismo apenas tres semanas antes de nuestro viaje, así que no quedó más remedio que subir y bajar la montaña por el mismo lado.
Datos prácticos
- Salida: de Cusco sobre las 4.30 de la mañana
- Llegada: a Cusco sobre las 16 horas
- Empresa contratada: Inka Time
- Precio total por persona: 110 soles por persona (unos 28 €)
Incluido en el precio:
- Recogida en el hotel, traslados y guía
- Desayuno y almuerzo
- Bastón de trekking
- Tasa turística para entrar en la montaña
Consejos y recomendaciones
- La cima de la montaña marca una altitud máxima de 5036 msnm por lo que se recomienda estar totalmente aclimatados a la altitud (pasar al menos un par de días en Cusco) antes de realizar este tour.
- Existe la posibilidad de subir a caballo un tramo, pero no quita de subir a pie la parte final del recorrido (que no es precisamente la mejor).
- Si aparece la fatiga o el corazón se acelera hay que parar y respirar profundo, pero nunca sentarse.
- Si llevamos mochila que sea con lo mínimo imprescindible.
- En la cima hace bastante aire, nos aconsejaron además cubrirnos la cabeza con un gorro y no estar más de 20 minutos.
- No es necesario llevar zapatillas de montaña, el camino es cómodo, de tierra y sin piedras.
- Recomendable llevar caramelos de coca.
- Imprescindible: gorra, crema solar y gafas de sol.

Nuestra experiencia
Nos vienen a buscar al hotel, muy puntuales, a las 4.30 de la mañana. Sobre las 6.30 de la mañana paramos a desayunar. El desayuno es tipo bufete y está bien, pero somos el último grupo en llegar y ya hay bandejas que no reponen.
Las dos primeras horas del trayecto discurren por una carretera asfaltada (la misma carretera que pasamos viniendo de Puno), la última hora es un camino de tierra.
Llegamos al aparcamiento, pasamos por el baño (1 sol por persona), nos dan un bastón a cada uno, comprueban el peso de nuestras mochilas, nos echan agua florida en las manos (para ayudarnos con la altitud) y empezamos el trekking.
Nos acompañan dos guías, uno va con los que andan más rápido y, el otro, se queda con los más lentos. Los dos son majísimos, nos dan buenos consejos y están pendientes de nosotros en todo momento.
Hasta la cima de la montaña hay un poquito más de 3.5 kilómetros, durante el recorrido hay dos pequeñas paradas con baños y puestos de comida. El camino es cómodo, sin piedras, se puede hacer en cualquier tipo de zapatillas.
Dani sube sin problema y casi sin fatigarse (es lo que tiene estar en forma y que la altitud no te afecte). Yo subo bien la mayor parte del tiempo, pero en el tramo final noto que mi corazón va a 1000 por hora y tengo que pararme a respirar profundamente, beber te de coca (lo habíamos preparado el día anterior y lo llevábamos en una de las botellas), comer caramelos de coca hasta que consigo bajar pulsaciones y seguir.
Hace un día soleado pero, según vamos acercándonos a la cima, hace bastante aire y tenemos que ponernos las cazadoras. También nos recomiendan, por la altitud, ponernos gorros (nos habíamos llevado gorros técnicos y los ponemos debajo de la gorra) y no estar en la cima más de veinte minutos.
Alcanzamos la cima: 5036 msnm.

Hacemos unas cuantas fotografías y el guía nos indica que iniciemos el descenso.
Nos despistamos de la gente y no sabemos si somos los primeros o los últimos del grupo en iniciar el descenso, así que, por si acaso, bajamos a buen ritmo hasta el aparcamiento, al que llegamos a las 11.30 de la mañana. Resulta que somos los primeros… (esperamos entre 30 y 45 minutos a que llegue el resto).

Según nuestros relojes la ruta, en total, nos ha costado 2.53 horas y hemos hecho 7.30 kilómetros.
Desde aquí nos llevan a almorzar al mismo sitio donde hemos desayunado. El almuerzo está incluido en la excursión, pero no así las bebidas, que se pagan aparte. Comemos bastante bien y llegamos a Cusco a las 16 horas, nos dejan muy cerquita de la plaza de Armas.